Hacía más de 20 años que todo estaba tranquilo en el mundo mágico, al menos en
Inglaterra. Pero el Jefe de aurores estaba preocupado, se había comunicado con
el presidente del MACUSA, y este le había informado que estaban sucediendo
cosas extrañas en América, lo mismo que en aquella época, le había dicho. Sin
mencionar que una semana antes de esa videoconferencia, una familia de magos
había desaparecido y una de muggles había muerto por causas inexplicables para
el ministro Muggle.
Harry Potter
había vuelto a sentir el mismo miedo que cuando era Adolescente y no por el
mismo, sino por sus hijos, su familia, el mundo Mágico.
A sus oídos
habían llegado los comentarios de que había una persona que queria el control
del Ministerio de Magia, y que estaba reclutando Magos y todo tipo de Bestias
para iniciar una guerra. Dos semanas después, otra familia de Muggles apareció
muerta y en una de las paredes de la casa donde los encontraron había una
marca, no se parecía en nada a la anterior marca tenebrosa, era una mezcla de
runas y al final una H y una M, como si esa fuera la firma. Un escalofrío
recorrió a todos los magos y brujas de Inglaterra cuando leyeron el periódico,
algo malo se avecinaba y querían hacer oídos sordos, pero el sol no se tapa con
un dedo.
Ahora solo quedaba unir fuerzas y luchar contra lo que venga.
Ahora solo quedaba unir fuerzas y luchar contra lo que venga.
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